Hola amig@s lector@s
Hoy, desde El Rincón de Rovica: He perdido el tiempo… He perdido el tiempo. Que alguien me ayude… porque no sé dónde lo dejé. Era un tiempo así como breve, hermoso, delicado, lleno de buenos momentos y de algunos malos también. Seguro que tú, también lo reconocerás enseguida. No tiene pérdida posible, por eso, me extraña haberme despistado con tanta facilidad. No hay otro tiempo así o al menos, yo no lo recuerdo. He perdido el tiempo y necesito encontrarlo. Razón aquí y ahora o mejor dicho, ya!
He perdido el tiempo. Y la verdad, no sé, cómo ha podido volverme a pasar. Porque, esta vez, lo teníamos todo atado y bien atado, a buen recaudo, y encima, sin necesidad de pasar por ningún sitio a firmar. Sabíamos que lo nuestro era especial. Lo sentíamos, no hacía falta ni decirlo, lo sabíamos y ya está. Lo teníamos tan claro, que lo único que nos daba miedo, era dejarlo escapar.
Sin embargo, lo tratamos como si fuese de lo más rutinario. Qué capullos fuimos Dios…! Lo irrepetible que era esta ocasión y la oportunidad que la vida nos brindó. Como si después de todo lo que hemos vivido, nos mereciésemos volver a querernos bonito, volver a volar… Y tú y yo ahí, como si no fuese con nosotros, hemos vuelto a hacer lo de siempre, darlo todo por hecho, sin darnos cuenta, de que, lo que habíamos tenido hasta ese momento, no se volvería a repetir más. Nunca más.
Pero que no cunda el pánico, porque he perdido el tiempo sol@ también. He creído que las cosas que no pasaban, eran porque no tenían que pasar. Viéndolas venir, esperando a la vida repanchingad@, en vez de mover el culo e irla a buscar. Y de ese modo sólo te vienen malas noticias. Porque esa es la gran diferencia entre las buenas y las malas noticias. Que las malas siempre vienen solas, sin necesidad de que hagas nada. Las buenas, en cambio, sólo les llegan a l@s que se embarcan dispuestos a naufragar.
Le he exigido a la vida tantas veces una nueva oportunidad. Como si fuese algo más que un derecho, como si fuese su responsabilidad. Y ella, que ya de por sí es puta cuando no le exiges nada, imagínate cuando encima le vacilas y le vas de guay.
He perdido el tiempo, dedicándoselo a gente que no valía la pena y echando de menos a los de verdad, diciéndoles que a ver cuándo nos vemos, mintiéndoles a ellos y a mí una y otra vez, dejando la vida pasar. Borrándome de sus fotos futuras, comiendo en casa sol@. Llamando a tip@s irrelevantes, gastando minutos en cosas urgentes, en vez de hablar de lo que de verdad importa. Repasando agendas y dietarios, en vez de las curvas y líneas rectas que tienden hacia la felicidad.
Por eso aquí ando, buscando de nuevo ese tiempo perdido. Otra pérdida de tiempo, pensarás. Pero la verdad es que, me importa muy poco lo que pienses ahora. Necesito encontrar ese tiempo y ponerlo de nuevo a pasar. Además, habérmelo dicho entonces, cuando perdía el tiempo. Haberme avisado cuando todo me daba igual.
Hoy me queda menos que entonces, hoy el paso del tiempo se ha acelerado y ha cogido velocidad. Y sin embargo, aquí estoy, como un imbécil gastándolo en algo tan improductivo como recordar. Echo de menos el tiempo perdido. Y lo quiero recuperar. Lo pienso recuperar. Y lo voy a recuperar.
Hoy, quiero decir las cosas que siento, cuando las sienta. Esté sentad@ con quien esté sentad@. Y si estamos acostados ya ni te cuento. Y si cuando se lo digo no le gusta, él o ella verá. Hoy, me da lo mismo, caer mal o regular. Porque, si para caerte bien, tengo que ser otra cosa, prepárate para aguantar. Hoy, además, soy menos exigente con los demás. Porque ahora sé, lo que cuesta arriesgarse y lo difícil que es acertar. Es curioso, cada vez juzgo menos y cada vez me juzgan más. Pero también, soy muchísimo menos transigente con la falta de inteligencia, de sinceridad y -sobre todo- de humanidad. Hoy creo, que una conversación puede ser sanadora. Y que un silencio fuera de tiempo, te puede acabar de condenar. Callarse, es cada vez más peligroso. Y negarse a aceptar algo, puede ser un principio, para encontrar un pedazo de eso que llamamos verdad.
Quiero decir «te quiero» cuando me dé por ahí, sin miedo a lo que me puedan contestar. Porque el miedo, es eso que te pasa por dentro, cuando estás a punto de hacer lo que tienes que hacer.
Hoy salgo de casa, como quien aterriza en una ciudad que no ha visitado jamás. Con un mapa distinto cada día, con miles de monumentos a visitar. Con una guía que se llama intuición. Y una maleta llamada recuerdo. Una divisa que no admite cambio alguno y se llama honestidad.
No me malinterpretes, puede que todo esto te parezca una “jilipollez”, otra pérdida de tiempo, o puede que incluso le hayas encontrado algo de utilidad. Pero te lo digo con todo el cariño… “me la suda”. Sabes…? Como que… me da igual.
Porque yo ya he perdido el tiempo, pero, del muy bueno y en cantidad.
Puede que me haya vuelto loc@, o viej@, o todo a la vez.
Y que el tiempo sea lo único, que jamás me vaya a volver…
Risto Mejide.
Editado e Ilustrado por: Rovica.
Gracias.
Gracias a ti por estar siempre Roberto.
Siempre estaré Rovica porque su blog es uno de mis preferidos.
Un gran placer y gran honor Roberto. De corazón, mil gracias!
De nada
nunca se pierde el tiempo se acumulan experiencias, unas buenas y otras no tanto, con alegrias y frustaciones com no puede ser de otra manera
Y después, hay que aprender de las lecciones que te dan las experiencias. De las buenas disfrutarlas al máximo y de las no son tan buenas… intentar rectificar para no volver a tropezar con la misma piedra. Gracias Juan Miguel.
Solo perdemos o malgastamos el tiempo que no pensamos, que dejamos de imaginar o aquel en el que no soñamos.
Cierto jmvanjav. Cuando dejas de tener sueños e ilusiones con alguien ya estamos malgastando el tiempo.
¡Espectacular…!
Gracias Lucio!
Alguien dijo una vez… El tiempo sin Ti… es sólo empo. Partiendo de esa base disfruta de cada segundo del tuyo, de tu tiempo. b7s.
Gracias josep ????! Totalmente de acuerdo con tu opinión ???? He escuchado muchas veces que “el tiempo es oro”, creo que es porque hagas lo que hagas, ese momento es único y no volverá, por eso tendríamos que darle el valor que tiene, hay cosas que se pueden recuperar, pero el tiempo no es una de ellas… Un abrazo amigo.
Me encantó, Rovica!
Muchas gracias Úrsula !
Practicar el arte de la vida, hacer de la propia vida una “obra de arte” equivale en nuestro mundo moderno líquido a permanecer en un estado de transformación permanente, a redefinirse perpetuamente transformándose (o al menos intentándolo) en alguien distinto del que se ha ido hasta ahora. Esta es mi experiencia después de haber leído tu texto. Felicidades.
Te invito a leer mi más reciente publicación llamada Así conocí a Pablo Escobar… Gabo llega en su momento. Te comparto el link
https://lagachamanzanaequis.wordpress.com/2018/08/01/asi-conoci-a-pablo-escobar-gabo-llega-en-su-momento/
Todos en algún momento de la vida cometemos errores, pero esas vivencias son experiencias y lecciones que te van enseñando. Pasado el tiempo, solo te quedas con los buenos recuerdos. No dudes que me pasaré por tus publicaciones. Muchas gracias La Gacha Manzana Equis. Un abrazo!
Llámame Sam.
Encantada Sam !
Todos hemos perdido el tiempo alguna vez. Gracias por este post. Saludos
Cierto Yasel tod@s en algun momento de nuestra vida hemos podido perder el tiempo, pero lo importante es aprender de esa experiencia y después intentar recuperar el tiempo perdido con algo o alguien que te haga sentir vivo nuevamente. Muchas gracias por comentar. Un abrazo amigo.
Me voy a apropiar de «Que las malas siempre vienen solas, sin necesidad de que hagas nada. Las buenas, en cambio, sólo les llegan a los que se embarcan dispuestos a naufragar». Muy hermoso y revelador.
Me parece estupendo que te quedes con la frase que te gusta😊. Muchas gracias Paula.🌼😘😊🙋♀️
La vida es una suma de aciertos y errores y solo se pierde el tiempo cuando no se reflexiona y lo que escuché, bien me dice que aprovechaste bien. El desacierto lo transformaste en palabra y poesía. Abrazo y rosas.
Mil gracias estimado Rubén. Otro abrazo para ti amigo 🌸🌷🤗😊