• Autor de la entrada:
  • Categoría de la entrada:Mis Escritos
  • Comentarios de la entrada:5 comentarios
  • Tiempo de lectura:3 minutos de lectura
  • Última modificación de la entrada:05/09/2024

 

 

Es imposible hacer todo lo que hay que hacer en un día. Dice mi madre que diariamente hay que comerse una manzana por el hierro y un plátano por el potasio. En la tele dicen que, todos los días hay que tomarse dos litros de agua. Todos los días dice mi padre, hay que tomarse un Actimel. Todos los días tomar una aspirina, dice mi abuelo, para prevenir los infartos. Cada día dos dedos de vino y un vaso de cerveza, dice mi tio Juan. Y bueno, si te lo tomas todo junto, aunque te de el infarto ni te enteras.

Mi nutricionista dice que a diario hay que comer fibra, mucha fibra, cuanta más fibra mejor. Y también te tienes que comer una naranja para la vitamina C. Y un donut si quieres tener un «día redondo», bueno, eso lo digo yo. Tambien dice mi amiga Helena que, por supuesto, hay que hacer las tres comidas diarias sin olvidarte que cada vez, tienes que masticar cien veces y después lavarte los dientes.

En fin, que haciendo el cálculo, solo en comer se te van cinco horitas. Todos lo días hay que dormir ocho horas y trabajar otras ocho, más las cinco que empleamos en comer, veintiuno. Nos quedan tres. Curiosamente, y según las estadísticas, vemos un mínimo de tres horas diarias de televisión.

Hay que cuidar las amistades (porque las amistades son como una planta, hay que regarlas a diario)… y si es con cerveza o unos drinks, pues mejor…no? ¡Ah! Y no nos olvidemos que hay que practicar sexo todos los días pero, sin caer en la rutina, con lo cual, hay que innovar, que lleva su tiempo. Y cuidado, que también hay que buscar tiempo para barrer y limpiar, y no te digo nada si tienes perro, gato, o mascota alguna, mejor te suicidas.

En fin, a mi me salen 29 horas. La única posibilidad que se me ocurre es hacer varias cosas a la vez. Por ejemplo: mientras te duchas puedes abrir la boca y así vas tomando agua. Al mismo tiempo que te secas puedes comerte un donut, metiendo el plátano por el hueco. (del donut por supuesto, bueno, ustedes me entienden😌).

Cuando salgas del baño, tu ejercitas los brazos, mientras tu pareja camina haciendo el amor en la pose de la carretilla y con el cepillo de dientes en la boca, te amarras una escoba a la cintura y vas barriendo, de paso, que tu pareja vaya viendo la televisión y te cuente.

Después de todo esto, las personas (aún) nos ponemos dramáticas y todavía tenemos valor de reclamarle a los amigos(as): Por cierto…¿por que no me has llamado?. Espero que ahora comprendan, por qué a veces, no nos vemos o no los llamo.

De la Web
Rovica.

Esta entrada tiene 5 comentarios

    1. Rovica

      😂Sí Marcos, la verdad que cumplirlos todos, da un poco de pereza sí. Un abrazo amigo.

  1. macalder02

    Ni más ni menos me destornillado de la risa con tus ocurrencias. Lo has sabido llevar a un plano muy superior del humorismo. Te imaginé en una secuencia del desaparecido Club de la Comedia. Serías todo un éxito, además de tu belleza natural.

    1. Rovica

      ¡Que bien que te hayas divertido un rato Manuel! Esa es siempre mi idea, que paseis un buen rato leyendo mis textos. Muchas gracias. Un abrazo amigo.🌼😊

      1. macalder02

        Por nada Rovica. Siempre es un placer disfrutar tu nog. Tienes un buen contenido.

¿Te ha gustado? ¡Pues ahora te toca comentar!