Me Niego A Creer…

¡Que me digan lo que quieran, pero yo me niego a creer! No me creo eso que dicen de que el mundo es un lugar horrible, que está absorbido por la oscuridad, que está repleto de maldad. Eso que dicen de que la gente está loca y cada vez va a peor. No me creo nada en absoluto. No me creo que en este mundo no haya magia, que ya no quede brillo y se haya consumido su energía. Que me digan lo que quieran, pero yo no me lo creo. De hecho, no es solo que no lo crea, es que se cierto, que es mentira. Lo sé cierto porque yo lo he visto. Lo he vivido, lo he sentido…

He visto a gente desconocida ayudarse, así sin más, porque les sale de dentro. He oído a personas hablar de otras de la forma más emotiva y cariñosa, sin ningún tipo de mala intención. He acompañado a gente en un largo y duro camino en el que unos a otros se daban la mano, simplemente, para darse apoyo y ánimos. He conocido a personas con el alma tan pura, que purifican con solo rozarte. He sentido el inmenso amor de mis amigos e incluso de gente que apenas conozco.

He notado la fuerza de la unión y las ganas de la gente por estar unida con la pasión por una misma buena causa. He mirado a personas a los ojos y, enseguida he entendido, que están llenos de luz. De hecho, he visto, como son capaces de iluminar a cualquiera. He oído las historias más enternecedoras e impactantes, incluso algunas, he tenido el honor de vivirlas. Me he sentido acompañada por todo tipo de personas, de ángeles que se escondían tras caras desconocidas cuando más necesitaba compañía. He sentido las señales y los empujones hacía el camino correcto de esos mismos ángeles, escondidos, en los lugares más inesperados.

He vivido de cerca, de lejos, en mi propia carne o en la de alguien que me cruzaba por la calle, el amor que nos brindamos unos a otros. El amor que sigue existiendo en este planeta. Y es que el amor existe, siempre gana. Eso es así y nadie me va a convencer de lo contrario. Porque nacemos, vivimos, morimos y el amor está dentro de nosotros, constantemente presente, aunque algunos no lo quieran ver o admitir. Así que, que me digan lo que quieran, que yo no me lo creo. Porque este Mundo es fantástico y su gente también…

Elisa Doehne

Publicado por: Rovica.