Me ha tocado mi propia lotería. Me ha tocado ser yo. Enamorarme de personas locas. Me encanta el olor que se queda en las manos al pelar mandarinas. El sabor de la sandía fresquita en verano. Y comer galletas con leche en invierno. Inundar los platos de pasta con queso rallado. Nunca salgo sin mi colonia preferida. Me gusta los pantalones, los vestidos y las camisas boho. Siempre me voy mirando en el reflejo en los coches aparcados y en los cristales de cada tienda que paso.
De pequeña leía hasta las etiquetas de los botes y sigo haciéndolo. Soy hipocondríaca de nacimiento. Soy impaciente, exigente, me agobio con facilidad. Soy de charlas profundas y largas con amigos. De debatir hasta la noche sobre el amor. Bailo mejor que canto e intento acariciar mejor que escribo. Soy de sangre caliente, pero muy de abrigarme en la estación fría. De estar, sentir y ver mucho el mar, no puedo vivir sin él. Soy de escribir hasta en los manteles y servilletas del restaurante. De viajar de aquí para allá. De hacer o decir cualquier tontería para que alguien sonría. De estar tres días triste en casa y treinta sonriendo. Soy una historia más. Soy mi propia lotería…
Me encanta tu positivismo, se contagia.
Me alegro un montón. Gracias Marcos. Es cierto que la vida no siempre tiene momentos agradables, y no reconocer eso es engañarse. Sin embargo, existen muchas razones por las que sonreír cada día y encarar nuestra vida con la mejor actitud posible. Un abrazo amigo.
Pues encantadoramente vital. Hay que saborear esta vida a lametones como si fuera un helado de sandía. Por cierto yo también me miró en los escaparates pero en los de los bancos no. Me ha encantado, saludos.
Javi
Muchas gracias Javi. Sabes? Haces muy bien en mirarte, como yo, en los escaparates. En el de los bancos, solo…lo justo y necesario😂😂. Un abrazo amigo.