Soñar no cuesta nada, pero, convertir un sueño en realidad es cuestión de trabajo duro. Nada cae del cielo, excepto la lluvia, pero, después de eso, nada. Trabaja con esfuerzo y tenacidad por lo que deseas y te aseguro que lo lograrás.
Haz que tu corazón sea la caja de los momentos. Ahí encontrarás la prueba de tu esfuerzo, cada pequeño logro, cada momento de felicidad, cada sonrisa, cada recuerdo positivo, guárdalo todo allí. Cuando te sientas decaíd@, ábrela y saca fuerzas de ella, pues ese es su cometido. Recordarás entonces, lo fuerte que eres, que tuyo es el presente y que el pasado, pasado está.
Ten en cuenta, que lo esencial, solo se ve con el corazón y este lo llevas dentro y lo encontrarás siempre, en cualquier lado que te encuentres. Sentirás, que la suerte solo es, el resultado de tu constante y duro trabajo. Y comprenderás entonces, que solo lo que tú hayas conseguido y querido, quedará. Y eso es lo que en realidad, te debe llenar y alegrar…
Muchas veces la suerte no es por desgracia el resultado del trabajo duro, pero siempre habrá valido la pena intentarlo. Un abrazo.
La suerte no existe, existen las oportunidades y, sobre todo, estar atent@ a ellas. Cuando luchamos por nuestros objetivos y lo conseguimos, es mucho más sencillo para el resto aludir a la suerte y no pensar que, hay que tener la valentía y constancia suficiente para aprovechar esa oportunidad y que no siempre es cuestión de suerte, si no que realmente detrás, hay mucho, mucho trabajo, dedicación y esfuerzo. Un abrazo grande Paz.