Somos tú y yo. Nos vemos reflejados en nuestros ojos… Quedémonos en silencio, solos, en este nuestro mundo y de nadie más. Cerremos los ojos, imaginemos y permitámonos de una vez, sentirnos vivos… Tu eres la excepción, la única razón por la cual decidí volver a creer en el amor…
Rovica.
Para creer en el amor hay que caer en la dulce contradicción de la eternidad. Un abrazo.
El alma es clave en estas creencias; es el soplo divino que da vida a la materia, en el que residen los sentimientos que mueven al ser humano a buscar al otro. Esa continua búsqueda ha producido en la historia de la humanidad los más bellos poemas de amor… Otro abrazo para ti amigo Carlos 😘😊